Culiacán, Sin., a 11 de mayo de 2018
El delito de violencia familiar aumentó 22% y alcanzó la cifra más alta de la que se tenga registro en el Semáforo Delictivo
Culiacán, Sin.- Después de que el homicidio bajó hasta el indicador verde durante febrero, en abril este delito incrementó 20% y volvió al rojo en el Semáforo Delictivo, informó Ricardo Jenny del Rincón, Coordinador General del Consejo Estatal de Seguridad Pública.
Con la presencia de los Consejeros y Consejeras de este organismo ciudadano en el evento mensual organizado en conjunto con la asociación Construyendo espacios para la paz, Ricardo Jenny del Rincón agregó que con 114 casos ocurridos, abril se convirtió en el mes con más homicidios en lo que va del 2018, reflejándose así una ligera tendencia al alza.
Por ello, recordó que desde el mes anterior se advirtió que las cifras registraban un incremento y se pidió seguir estrategias puntuales y específicas para evitar que el homicidio repuntara, lo cual dijo “no se hizo, o no con la firmeza necesaria”.
“Reiteramos la exigencia de que no se den pasos hacia atrás, sino que se conformen estrategias adecuadas para alcanzar resultados sostenidos, pero sobre todo que haya voluntad de la autoridad, pues sin este último elemento no podremos avanzar”, expresó.
Jenny del Rincón detalló que el Semáforo Delictivo ubica en rojo a los delitos de homicidio (114 casos), robo de vehículo (476 sucesos), violencia familiar (373 denuncias) y lesiones (182 casos), mientras que en amarillo se encuentra violación (15 denuncias), y en verde secuestro (0 casos), feminicidio (3 casos), extorsión (6 denuncias), robo a casa (21 denuncias) y robo a negocio (60 casos denunciados).
En cuanto a los datos destacables, señaló que el delito de violencia familiar aumentó 22% y alcanzó la cifra más alta de la que se tenga registro en el Semáforo Delictivo. Los municipios con más casos de violencia familiar en abril fueron Culiacán con 145, Ahome con 70 y Guasave con 61.
En robo de vehículo expuso que también se observa un retroceso, pues después de lograr una disminución en denuncias y llegar al amarillo durante el mes de febrero, ahora seguimos en rojo y vamos de nuevo al alza.
En este caso reiteró el llamado a que se nombre nuevo encargado de la Unidad Especializada en Investigación de Robo de Vehículos de la Fiscalía General del Estado, misma que suma más de 2 meses sin titular.
“Sabemos que el buen funcionamiento de las dependencias o instituciones no depende sólo de su titular sino de todo un equipo especializado, pero en cuestiones de seguridad no podemos experimentar. Lo peor que podemos hacer es dejar sin una cabeza firme a una unidad tan importante que debe trabajar para combatir ese delito que se acumula por cientos, afectando la tranquilidad y el patrimonio directo de las familias”, manifestó.
Desaparecidos
A pregunta expresa del público presente, Jenny del Rincón explicó que el tema de desaparecidos no se contempla en el Semáforo Delictivo debido a que no se cuenta con cifras concretas por parte de la autoridad, lo que dificulta la medición de la problemática.
“Hemos pedido que se incluya este rubro, pero no podemos incluir algo de lo que ni siquiera tenemos datos por parte de la autoridad. El tema de desaparecidos, así como el de desplazados, han sido prácticamente ignorados por la autoridad, al grado de no contar con registros puntuales sobre estas problemáticas.
Detalló que según el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas, en Sinaloa hay 2,783 personas desaparecidas, lo que nos ubica como el cuarto estado con más casos.
No obstante, criticó que a pesar de lo alarmante de las cifras, el problema tiende a invisibilizarse, a normalizarse bajo la etiqueta de los ajustes de cuentas entre grupos criminales, con lo cual se minimiza la situación y deshumanizamos por la indiferencia.
“Por ello, es urgente la implementación de una estrategia integral que permita acabar con los patrones de inacción y negligencia por parte de la autoridad que vemos no sólo en Sinaloa, sino en todo el país. La exigencia es establecer protocolos de búsqueda e investigación aplicables a las desapariciones, y empezar a determinar, caso por caso, la suerte o el paradero de las personas que han sido víctimas de este delito, juzgar a los responsables y garantizar el derecho a la verdad y a la reparación”, concluyó.
